Santuario de Arantzazu. Esta ascensión comienza en el aparcamiento del Santuario. Tomamos el camino por detrás de la Basílica hasta encontrar una verja verde que atravesaremos. El camino nos llevará hasta Urbia, primer tramo de esta ascensión. (Más detalle en la excursión a Urbia)

Collado de Elorrola. Esta subida suave de tres kilómetros de ascenso, entre hayas trasmochas y pino alerce, culmina en este collado que a modo de entrada nos presenta el escenario de las campas de Urbia.

Campas de Urbia. Tras pasar la ermita y siguiendo el camino trazado de fresnos y olmos es inevitable que la vista deambule a derecha e izquierda sobre esta alfombra de fina hierba, mantenida por ovejas y pastores desde tiempos inmemoriales.

Txabolas de Arbelar. Son el testimonio y refugio de este modo de vida pastoril de montaña. En este punto comienza la ascensión fuerte por la roca caliza o también conocida como Karst.

El karst- Pared rocosa. Paso a paso y salvando la empinada pendiente las botas se fijan en la dura y quebradiza caliza que forman la pared sur del cresterío de Aizkorri.

Ermita de Santa Cruz. Para alcanzarla gozaremos de algo menos de dos kilómetros de ascenso suave deleitándonos con las infinitas vistas que se descubren desde esta cresta emblemática de Gipuzkoa. La ermita y el refugio, coronados en esta cima, nos dan la bienvenida y nos ofrecen el merecido descanso.